Mi función como procuradora es garantizar que su procedimiento judicial avance sin errores ni retrasos. Para ello, me encargo de cada fase del proceso: desde la representación ante los juzgados hasta la entrega y recepción de documentos, supervisando todo con atención directa y personal.
Actúo como su representante legal ante los tribunales, encargándome de todas las comunicaciones formales con los juzgados.
Este servicio incluye la presentación de poderes, la interlocución directa con los órganos judiciales y el seguimiento de los actos procesales en los que sea necesaria mi intervención. Mi función es asegurar que todo el procedimiento se ejecute con respaldo legal y sin fallos de forma.
Me encargo de recibir y tramitar todas las notificaciones judiciales relacionadas con su procedimiento. Además, presento los escritos procesales en nombre del cliente, asegurando su entrega dentro de los plazos establecidos y con los requisitos formales exigidos.
Este servicio permite un control detallado del estado del expediente y evita cualquier incidencia por omisión o retraso documental.
Ofrezco apoyo y seguimiento continuo durante todo el proceso judicial. Estoy disponible para resolver dudas, informar sobre el estado de los trámites y actuar con agilidad ante cualquier requerimiento.
Mi acompañamiento facilita la coordinación con abogados y partes implicadas, anticipando necesidades y adaptando mi intervención a las exigencias de cada fase del procedimiento.